Si tenés dudas, la invitación es a reflexionar. Podemos poner la mirada en que tus padres hicieron las cosas de la mejor forma que pudieron con las herramientas que tuvieron en ese momento, tal vez así te resulte más fácil. Y si sos madre o padre reflexionar en que tus hijos son como son y no deberías pretender cambiarlos, son perfectos tal como son.
Es interesante pensar, qué podemos hacer hoy para ser mejores hijos, qué podemos hacer hoy para ser mejores padres?
Y si deseas ir más allá, te invito a resignificar tus creencias y memorias limitantes ancestrales y lograr el cambio que estás necesitando.
Recordá siempre que no estamos reemplazando ningún tratamiento psicológico o médico que estés realizando.