Es un conflicto de desvalorización en relación a la familia. Tiene que ver con el corazón, las arterias, las suprarrenales y los riñones. Está presente en fase activa del conflicto, pero suele descubrirse en fase de reparación. Biológicamente tiene que ver con presionar la sangre para que entre o salga más rápidamente o lentamente del corazón. De forma simbólica, a las entradas y salidas de los lazos de sangre del corazón. En la hipertensión central, masculina, las manos están calientes. En la periférica, femenina, las manos están frías. Las personas con hipertensión tienen un conflicto que no enfrentan.
Son viejos problemas emocionales no resueltos, con señales de agresividad reprimida. Acostumbran escapar de los problemas, no actúan. Puede existir también un conflicto de falta de reconocimiento, por ejemplo mujeres que asumen el rol masculino. Además podemos encontrar conflicto de de hacinamiento, cuando hay excesiva gente en casa o conflicto de resistencia a salir de casa.
Otros conflictos se relacionan con deber abandonar algo sin efectivamente desearlo, necesidad de ser el mejor o el primero, necesidad de poseer, conflictos de tensión en el clan.
Es muy importante que puedas tomar consciencia de este conflicto, para integrarlo y a partir de entonces, iniciar la búsqueda de su origen.