Es un hábito involuntario, normalmente nocturno, de apretar o rechinar los dientes debido a la tensión. Puede generar dolores de cabeza, oído y muscular de la mandíbula y cuello. También desgaste de los dientes y llagas en labios, paredes de la boca o lengua. Se relaciona con un conflicto de ira y agresividad reprimida con impotencia.
Biológicamente, es una irritación reprimida que no ha sido mostrada de forma normal y en vigilia, y que se manifiesta de noche. Muerdo lo que no he mordido durante el día. Es importante recurrir al #transgeneracional en busca de un yacente o fantasma. También puede existir un conflicto de secretos que deben callarse.
¿Cómo tomar consciencia de esos conflictos y sanar? En primer lugar, no dejes de ver a tu médico. Es muy importante no discontinuar los tratamientos médicos y psicológicos.
Recordá que #biodecodificar acompaña procesos, no los reemplaza.
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