Básicamente se trata de pensar en una cosa y hacer otra. El impulso es bloqueado necesariamente a nivel del cuello. A veces son conflictos con superiores en el trabajo o en la familia. El cuello es el punto de unión, la comunicación, entre cuerpo y cabeza. Esto manifiesta que los dolores y malestares que surgen en esta zona están conectados con la comunicación o de desvalorización intelectual.
C1 o atlas: corresponde a la lengua y al cerebro. Es soporte de la cabeza, la mantiene en equilibrio. Presenta molestias por miedo, negatividad y desesperación, provocando aparición de dolores de cabeza y problemas que perturban el sistema nervioso.
C2 o axis: enlazada con los órganos de los sentidos. Si me sujeto a mis antiguas creencias y me alarmo continuamente y de forma excesiva por el futuro, esta vértebra reaccionará poniéndose rígida. Se perderá lubricación y surgirá irritación, calentamiento y dolor.
C3: correspondida con la laringe. Nos tornamos susceptibles. También se relaciona con las mejillas, la cara y el oído exterior. Vinculada con problemas de desvalorización, de contacto y de estética, como acné, granos y eccemas. Complicaciones en esta vértebra pueden ocasionar perjuicios en el rostro, orejas y dientes.
C4: ligada a nariz y boca. Refiere a la comunicación verbal, al concepto real y concreto de las cosas. Muy usual en dificultades de comunicación en el trabajo.
C5: relacionada con la faringe y las cuerdas vocales. Conflictos que se viven como injusticia.
C6: corresponde a amígdalas y cuello. Enuncia conflictos sentidos como injustos y con desvalorización.
C7: se vincula con tiroides, manos, codos, brazos y hombros. Afectada ante conflictos de injusticia y/o de obediencia, de someternos contra nuestra voluntad. Entran en juego principios, valores morales, creencias.
Siempre recordá continuar con tus tratamientos médicos y psicológicos.
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Te espero, cuando así lo sientas 
